Evelio José Rosero Diago, Los almuerzos: Reseña

Share:

Listens: 0

Letra Inquieta

Arts


Toda «iglesia que se respete ostenta su jorobado», dice el  narrador de Los almuerzos. Y así ocurre en una parroquia de Bogotá  dedicada en apariencia a dar de comer a los necesitados, donde el  jorobado Tancredo se encarga de supervisar rutinariamente los almuerzos  que se ofrecen a diario.