Miscellaneous
Tuvieron fama de buenos arponeros los vascos, pero aquí ya consumíamos ballena desde los tiempos de Noega. Fue aquel un negocio próspero que duró en el Cantábrico, al menos, veinte siglos. De las ballenas se aprovechaba, sobre todo, el ‘saín’ o grasa, y su caza generó pingües beneficios que se vieron detenidos cuando aquellos grandes cetáceos dejaron de venir a nuestras costas